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Editoriales Roberto Passailaigue

EDUCACIÓN EN VALORES

EDUCACIÓN EN VALORES

Los procesos de enseñanza aprendizaje a nivel mundial, han cambiado o se encuentran en procesos del cambio de paradigmas para centrarse, más que en la enseñanza de conocimientos en la formación del ser humano, mediante el aprendizaje con valores y principios éticos, morales y ciudadanos, que moldean la personalidad, carácter y actitud positiva del estudiante.
Ya los paradigmas conductistas, doctrinales y memoristas no se aplican; y, en los países donde se privilegia la formación del estudiante como ser humano responsable y proactivo, han transformando la sociedad del conocimiento y conseguido un entorno vivencial de orden, paz y respeto. Esto por la formación, más que por la información.
En Ecuador, en muchos establecimientos educativos ya se aplica dicha metodología con excelentes resultados. Una gran cantidad de ciudadanos, grupos y sectores, piden cambios en el sistema educativo nacional, salir del estándar estatizante y dogmático de adoctrinamiento, para introducir una educación en valores con principios éticos, morales y ciudadanos, con formación en urbanidad y buenas costumbres, conceptos que la mayoría de los actuales actores sociales socializantes y progresistas irreverentes, no saben de qué se trata.
Uno de los grupos “Educación en Valores” liderado por Nelson Guim con y Anunzziata Valdéz de Contrato Social por la Educación, acompañados de múltiples organizaciones y personas, están impulsando el rescate de la cívica, ética, moral, urbanidad y buenas costumbres, con valores y principios, para promover una cultura de paz, orden y respeto, en la sociedad, por intermedio del sistema educativo.
El Presidente de la República Lenin Moreno y el Ministro de Educación Milton Luna, coinciden en los criterios y han opinado de manera favorable para el cambio del paradigma educativo dentro del Sistema Nacional de Educación, impulsando una educación formativa humanista, con valores y principios éticos, morales y ciudadanos. Coincido con los criterios que solo así podremos fomentar una cultura de paz y respeto, en beneficio de los jóvenes y por el bien del Ecuador.