La ley es una declaración de la voluntad soberana que, manifestada en la forma prescrita por la constitución, manda, prohíbe o permite, lo determina el artículo primero del Código Civil ecuatoriano. Lamentablemente en Ecuador, la ley es un punto de referencia para ver cómo hacer lo que no se debe hacer y para determinar su beneficio y costo.

Hemos visto como en el Poder Legislativo representado por la Asamblea Nacional, sus miembros violentan leyes y normas constitucionales, forzando interpretaciones seudo jurídicas, con evidentes fines políticos de sedición. Claro que existen honrosas excepciones, aunque muy pocas.

En el Poder Judicial, existen operadores de justicia que también violentan leyes, en especial cuando se trata de habeas corpus y de acciones constitucionales. En el Poder Ejecutivo pasa lo mismo, existen Ministerios y entidades públicas donde la normatividad jurídica es irrespetada, ya sea para materializar criterios ideológicos o para obtener algún resultado que los favorezcan de alguna manera. Igual pasa con los ciudadanos criados y educados en la cultura de la viveza criolla, la sapada, bacanidad, cinismo, corrupción y del quechu, de los últimos años.

Es vox populi que la mayoría de la administración pública, designada desde hace 14 años, son simpatizantes de la Revolución Ciudadana, Alianza País, UNES y demás aliados del Socialismo del Siglo XXI. Los hay hasta delincuentes y pandilleros, enquistados en la Asamblea, Ministerios y toda la administración, camuflados como “funcionarios técnicos”

Prohibido olvidar la nefasta actuación de aquel tecnócrata ministro de educación que, no sancionaba los casos de abusos sexuales a los estudiantes y que, con sus subsecretarios editaban libros para el adoctrinamiento y alienación de nuestra Juventud de escuelas y colegios. Señor presidente, de esos reciclados supuestamente técnicos, debemos cuidarnos por el bien del país, ellos anejan su propio guion, por eso entregan el botín de la Educación Intercultural y pretenden subyugar al sistema educativo con un nefasto borrador de reglamento y una normatividad progres.